viernes, 11 de enero de 2013

Rani (2013)

Nueva visita a nuestro restaurante indio de referencia, lo que tampoco es decir mucho, ya que venimos una o dos veces al año, y eso que nos gusta bastante, pero supongo que no encontramos el momento de volver tan a menudo como quisiéramos. En esta ocasión sólo somos tres los valientes que desafiamos a la fría noche barcelonesa para disfrutar de la sabrosa y especiada cocina de este local. (Aviso a los que no lo conozcáis que no es un sitio para venir con ropa de lana, punto o demasiado buena, porque el olor no se os irá en un mes.)
Como casi siempre pedimos un primero y un segundo cada uno pero luego lo compartimos entre todos, y si añadimos los platos de arroz para acompañar y los naan, también como casi siempre es demasiada comida pero para un día que venimos...¡pelillos a la mar! Y olvidaba los papadum del principio, que son esas obleas crujientes que sirven con tres salsas, una de ellas asesina por lo picante, para ir haciendo boca en plan aperitivo.
En la cuenta sólo salen los números de los platos y agrupados, con lo cual es difícil hacerse una idea de lo que comimos y cuánto costaba cada cosa pero escarbando un poco creo que lo he conseguido aclarar un poco. El nº 24 es el Panner Pakoda (4,35€), unos trozos de queso fresco rebozados que nos gustan bastante y solemos pedir, van muy bien para empezar. Seguimos con dos novedades para nosotros (las dos a 6,50€ cada una), ya que en los primeros solemos ir cambiando para probar cosas nuevas. El 62 es el Dalmakhni, unas lentejas fritas con nata, cebolla y más cosas que comprobamos que ya habíamos comido (bastante peores) en otro sitio de infausto recuerdo, y el 63 se llama Banghan Bhaji y era lo mismo que el anterior pero con berenjena. No estuvieron mal pero en estos guisos hindúes echo de menos encontrar más el sabor de los diversos ingredientes, ya que me parecen demasiado amalgamados y a veces no sabes si comes lentejas o berenjenas, salvo por la vista (y en ocasiones ni así, je).
Uno de nuestros fijos son las gambas Vandaloo (GV en la cuenta y a 13,50€), con una de las mejores salsas para mi del restaurante, bastante picante. El Murgh Jalfrazi (nº 32 a 8,50€) es un pollo que anuncian con pimienta, curry y picante, y resultó decepcionante no reconocer ninguno de esos sabores en la por otro lado sabrosa salsa que lo bañaba, no estaba mal pero no era lo que esperábamos. Y el 44 es un plato de cordero con salsa hindú y tomate llamado Lamm Karahi (9,50 €) que no llamó nuestra atención, bien sin más. Un plato de arroz basmati para cada uno para aprovechar como se merecían las diferentes salsas, y creo recordar que también pedimos tres naan, uno con queso, otro con cebolla y otro con ajo. Tres jarras de cerveza y una botella de agua grande nos ayudaron a trasegar todo esto y acabamos con los cafés y el habitual cóctel de cortesía de la casa, algo con mango que personalmente no aprecio por mi personal falta de cariño hacia dicha fruta.
La suma ascendió a poco más de 26 euros por persona y eso que como he dicho nos pasamos pidiendo comida, así que controlando un poco lo que se pide hasta se podría bajar la cuenta. Tienen varias cervezas indias de botella y las primeras veces las íbamos probando pero como no nos gustan especialmente (no están mal pero tampoco aportan nada diferente) y las cobran más caras, últimamente optamos por jarras de cerveza de barril.

Rani
http://www.restaurantehindubarcelona.es/
C/ Bailén 61 (esquina Diputación)
08009 Barcelona
93 244 05 76 (no está de más reservar)
Domingo-Jueves: 12,00-16,00 y 19,30-24,00
Viernes y Sábado: 12,00-17,00 y 19,30-01,00

No hay comentarios:

Publicar un comentario